Que la cuarentena y el confinamiento está poniendo a la mayoría de las personas a prueba, es un hecho que no se puede negar. Resultaría poco creíble decir que esta situación de crisis sanitaria, de incertidumbre sobre el futuro y de tener que estar la mayoría del tiempo en casa sin poder salir, no esta resultando un reto para la mayoría de las personas.
Sin embargo, la calidad con que vivamos esta situación va a depender de la actitud mental con la que la afrontemos y lo que decidamos hacer con esta situación.
Teniendo en cuenta que esta situación es bastante complicada para la mayoría y muy dramática para algunos, y que no se puede negar que a corto plazo parecen tener muchas consecuencias negativas, esta cuarentena también está siendo una oportunidad para muchas personas que están eligiendo sacar algo útil y positivo para ellas y para las personas a su alrededor.
La manera en la que pasamos este confinamiento depende, en gran medida, de nosotros. Evidentemente, hay personas que lo tendrán más fácil que otras y que cada situación es diferente, aunque sí queremos reducir la ansiedad y queremos conservar la salud mental, es conveniente tener en cuenta algunas ideas que les paso a comentar.
Mi visión es que da igual lo que hagas durante el día, ya sea estar viendo la televisión, trabajar o correr una maratón (visto en televisión), lo importante es que hagas con la actitud y la emoción adecuada, tratando de estar en armonía con las personas de nuestro alrededor.
Más allá de dar una lista de estrategias que, de ser seguidas, garantizan el bienestar, me quiero centrar en los que para mí son los tres pilares para tener una experiencia agradable durante el confinamiento:
Aceptación
Lo que tardemos en aceptar esta situación, es lo que tardaremos en dejar de sufrir.
De costumbre nuestra mente, especialmente ahora, considera que cualquier situación diferente es mejor a la que estamos viviendo. Es especialista en recordar otros momentos de nuestra vida y de imaginar futuros que, en algunos casos serán más agradables que otros. Dependiendo de lo que nuestra mente nos esté diciendo o imaginando y de la manera que esté valorando esta situación, estaremos sintiendo una emoción u otra (normalmente ansiedad, tristeza o enfado).
Aunque, es normal que nuestra mente haga eso (lo hace todo el tiempo) y nos sintamos ansiosos, es importante que la acostumbremos a estar y focalizarse en lo que estamos haciendo en cada momento, valorando y viviendo cada situación como es, sin valorarla ni juzgarla o negarla.
Mantener una actitud mental adecuada para afrontar la situación no necesariamente significa tener una actitud positiva sino más una actitud realista y objetiva. Como digo, esta situación en sí misma no es buena ni mala en sí misma, sino que depende de la manera con que estemos valorando internamente y en lo que nos estamos centrando en cada momento.
Respirar
Durante estas semanas, habrá muchos momentos que las emociones negativas, como la desesperación, la tristeza, el miedo o incluso el enfado, salgan a la luz y tomen el control sobre ti.
En estos momentos es recomendable tratar de cambiar el patrón de respiración y hacerlo de manera lenta y profunda. Se trata de parar y tratar de respirar de manera lenta y profunda durante unos minutos, y centrando toda la atención en el ejercicio.
Este simple pero poderoso ejercicio te ayudará a cambiar la dinámica negativa y tomar distancia de tus emociones para así no ser superadas por ellas.
Planificación
Otra estrategia que considero recomendable durante la cuarentena, y en la vida normal, es la planificación de los días teniendo en cuenta, que para la mayoría de nosotros, esta situación ha supuesto un cambio de hábitos.
Planificar la semana, priorizando por las tareas prioritarias e importantes será mucho más fácil porque garantizará que estaremos usando nuestro tiempo para algo que es importante y útil para nosotros. Para muchas personas el trabajo y/o el cuidado de los hijos e hijas será una de esas tareas prioritarias e importantes a las que hay que dedicar tiempo. Sin embargo, también hay otras tareas importantes aunque no urgentes que, si le dedicásemos tiempo, nuestra calidad de vida sería mayor y son del tiempo: realizar un poco de ejercicio, meditar, leer, aprender algo nuevo, etc..
Es importante que descubramos qué es lo importante para nosotros y que nos aseguremos que le dedicamos el tiempo necesario durante la semana antes de que los imprevistos, las excusas o lo que quiera que pase, no lo permitan.
Flexibilidad
Ser flexible es otra cualidad que considero muy saludable en esta situación. Ser flexible para cambiar lo que teníamos planificado porque ha surgido un imprevisto o porque ese día no lo sentimos así, y adaptarnos a lo que ocurre sin que eso suponga dejar de seguir con la planificación. Es evidente que sí, no somos capaces de seguir con una planificación establecida es porque no está alineada con nuestras prioridades y más bien nos estamos forzando a hacer cosas que no nos gustan o no son importantes para nosotros.
También ser flexibles mentalmente para tolerar la incertidumbre y los cambios que se producen. A la mente le gusta controlar y si hay algo que no controla, por lo general le dará miedo. Esta situación (como la mayoría) se escapa del control de tu mente y va a ser mejor que te adaptes a lo que está sucediendo de manera plena.
Más allá de estas cuatro estrategias, considero que esta situación es una buena oportunidad para la reflexión y la valoración de lo que tenemos y lo que nos gustaría vivir en el futuro.
Te invito a que, cuando acabes este confinamiento, seas capaz de describir lo que has aprendido de esta situación que te ayudará a ganar en tranquilidad y felicidad en el futuro. Quizás te des cuenta de que pasar tiempo en soledad es un regalo y aprendas a disfrutarlo más que antes. Quizás valorares más a las personas que están a tu alrededor, la naturaleza, tu trabajo o cualquier cosa que esté en tu vida que antes no valorabas. Quizás te des cuenta que no necesitas tantas cosas o hacer tanto como antes para estar bien o que pasar tiempo con tu hijo o hija es más divertido y apasionante que ver la televisión.
Sea lo que sea, depende de ti sacar algo positivo y útil de esta situación, que te ayude a ser una persona más tranquila y feliz, contribuyendo así a un mundo más sano y sostenible.